miércoles, 26 de octubre de 2011

Cuento para niños: El lobo conductor

Enviado por Gonzonet a través de Google Reader:

vía Bebés y Embarazos de silvia el 23/09/10

Nunca  estamos contentos con lo que tenemos. Ved, si no, el ejemplo de don Lobo, un conductor de autobuses a quién no le gustaba su oficio ni pizca. ¿Resultado? Don Lobo se pasaba buena parte del trayecto chillándo y protestando por las cosas sin importancia. Hacía pagar a con su malhumor a todos los que subían al autobus.
—¡Venga, a ver si suben ustedes de  una vez, porque demoran tanto! ¿Es que están dormidos o qué?  ¡Ay,señor, menudo oficio el mío! Repetía una y otra vez.
Naturalmente, los pasajeros se desconcertaban ante la conducta de don Lobo quién, al final del trayecto, tenía por costumbre tomarse un descanso más largo de lo habitual. A veces llegaba a pasarse media hora recostado sobre un árbol que estaba junto a la parada, lo que representaba una gran pérdida de tiempo para centenares de animalitos que iban a trabajar con la hora  justa para llegar a su trabajo, a para aquellos que regresaban cansados a sus casas.
Numerosas protestas contra don Lobo se recibieron en la Empresa propietaria de la línea de autobuses. El irritable conductor fue amonestado en varias ocasiones, pero, como no hacía el menor caso, fue relevado de su puesto. El Ayuntamiento, a cuya plantilla pertenecía don Lobo, decidió que don Lobo pasasé a realizar tareas de barrendero.
Como podréis suponer, don Lobo notó el cambio. Por vez primera comprendía que hay oficios mucho peores que el de conducir autobuses.
—¡Oh, qué pesadilla! ¡Me he convertido en barrendero! ¡Si pudiera volver a sentarme en ese cómodo sillón del autobús y seguir conduciendo…! —se lamentaba don Lobo.
Era demasiado tarde para arrepentirse. Por fortuna, don Lobo pudo obtener otro empleo y ya nunca más volvió a protestar contra su oficio de conductor. ¿Qué hace ahora? Bueno, me han dicho el otro día que conduce microbuses.
¡Si vieran amiguitos con qué alegría lo hace! Creo que don Lobo por fin aprendió la lección.
Extraído: Libro de fábulas


Cosas que puedes hacer desde aquí:

No hay comentarios: